Desde mi Ventana

Quiero que tu pecho reconozca la silueta de mi espalda. Quiero ser tus miedos y el suspiro de valor que tomas antes de actuar. Quiero que el olor de tus pétalos se me quede tatuado en la piel. Y el néctar de tu ser me quite la sed.  Quiero ser tu llanto, tu saliva, tu sudor. Los gritos de terror cuando no encuentras la salida. Quiero ser ese camino  por el que tienes que pasar al menos una vez en tu vida. Ese calorcito que te va a faltar en invierno, Que tu hogar sean mis pieles. Te quiero aunque a veces te marchites, Y por las noches tus espinas se deslicen por mi piel dejando cicatrices.

Me encanta como vuela mi imaginación si pongo tu nombre en la punta de mi lengua, mis palabras las escribes tú, porque eres todo lo que quiero decir. Me encanta el susurrar de tu boca sí está cargado de deseo. Y así como me encantas tú en toda tu esencia, también me encanta en lo que me convierto cuando sopla tu brisa, cuando siento tus pasos, cuando me calmas. Y en la inmensidad de la paz que me otorgas, encuentro el idilio en una sonrisa inerte y en un suspiro que acaricia mi frente de pronto desaparece  como un arco-iris de espejuelos que me traga en la cavidad más húmeda de la noche. Justo ahí, tan solo con cerrar mis ojos, difuminar en él cielo tu sonrisa, sentarme en la luna para así escribir en ella tu dulzura, Puedo sentir el sublime rose de tus labios con los míos, siento tu olor, tus insistentes latidos del corazón  Y esa sonrisa extasiante que celo con temor. Me encanta cuando cierro los ojos para tocarme donde vos lo hacías

Quisiera ser un ave,  y volar alto para verte por la ventana mientras duermes. Quisiera ser un pez, recorrer tus mares salados  y curarme con ellos las heridas pasadas. Quisiera que miráramos al frente  y veamos lo mismo.  Que aunque las diferencias nos distingan  no nos separen.  Que me beses sin preguntar,  me cojas sin pedir permiso.  Que me hagas tuya sin atarme.  Que bailemos a nuestro ritmo nuestra música. Quisiera ser un puente,  que una nuestras naciones separadas  por un océano sin costas.  Quisiera ser menos complicada  y ser más comprendida por alguien que no seas tú,  para al menos tener otra salida. Quisiera ser tu mano  y deslizarla por mi piel  como quien camina por primera vez. Quisiera juntos correr los miedos,  pasear de la mano por los recuerdos. Quisiera que seamos infinitos como el mar.

Hoy el mundo se paraliza gracias a ti, A ti que no desmayas aunque te golpeen fuerte, te muestras aunque te tapen, luchas aunque ya lo has perdido todo, porque sabes que no todo se ha perdido. A ti que con tu vientre regalas vida, gritas más fuerte cuando intentan callarte, A ti que no te da miedo nada, a pesar de tener el juego en contra, sales a la calle y triunfas. A ti que dices NO a la sociedad,  al maltrato,  al patriarcado,  a las leyes... Y están cambiando,  el mundo está observando  y es GRACIAS a ti Mujer. - Poema escrito por el día de la mujer. 08/03/18

Entre tu boca y la mía se me va la vida. Me he dado cuenta que hemos dicho todo  y nada al mismo tiempo Pero cuando estamos así,  sin aliento,  las paredes nos ataja n,  el agua no nos moja,  las palabras no son de mi boca ni de la tuya,  somos dos almas gritando sin hacer bulla. Entre tu boca y la mía hay demasiado aire,  demasiado espacio y muy pocos besos, que bueno que aún nos sobran ganas,  espero que no nos falte tiempo. Podría ir contando uno a uno tus lunares  y perderme o encontrarme en ellos,  de igual forma,  te tengo.  Entre tu boca y la mía  me volví adicta,  cuando probé tus labios entendí,  por qué las drogas están prohibidas.  Entre tu boca y la mía  hay que reducir el espacio  y sumar más saliva. Entre tu boca y la mía  me quedaría toda la vida.